NO ES LO QUE ME INTERESA, PERO ALGO HAY QUE DECIR

Otra vez la misma historia, que le pasa al periodismo deportivo uruguayo, que ha bajado tanto su óptica sobre el análisis del fútbol.

El miedo a que el sistema los neutralice y les impida seguir trabajando a muchos, se han transformado en serviles para decir lo que no es.

Señores presentemos en los medios, micrófono mediante, el equilibrio y la realidad sobre lo que pasó en Argentina 1 Uruguay 0 en el CDS.

88 minutos, con la adición incluida tuvo Uruguay para, dar vuelta un resultado adverso, que se transformó en otra derrota.

Y ganó bien Argentina, pero como lo digo siempre, la gente terminó aplaudiendo derrotas, es de no creer, pero es tal cual.  Así pasa en Nacional y en Peñarol, aplauden derrotas. Y eso ya de por si invalida la exigencia y da paso al conformismo barato.

Que Uruguay puso algo mas que en partidos anteriores, nadie dice lo contrario, que tuvo algunas chances de gol tampoco, pero el golero argentino solo hizo la atajada esa que se tiró hacia atrás y la del centro de Torres que de casualidad salió hacia el arco, y mas nada. 

Pero los argentinos tuvieron alguna también, lo de Uruguay fuerza, ganas, y poco mas, Argentina fútbol atildado, y sin Messi al que querían y se incentivaba a reventarlo, eso quería la gente pero también sectores del periodismo en todo lo previo.

Aquello que es un axioma del fútbol, que la pelota mientras la tengo yo, no la tiene el contrario, es lo que hizo el equipo albiceleste, y eso que jugó a media máquina.

Pero los giles que van a ver a esta selección, creen que es mas, y se chasquean feo y después lloran aunque aplauden la derrota.

Argentina hace correr la pelota, y Uruguay corre detrás de la pelota, y se va agotando en su fuerzas lentamente.  Dos manera de jugar al fútbol diferentes, pero con manejos abismales en la concepción del juego. Uruguay vertical, Argentina saliendo del fondo y tocando y así es el fútbol de hoy, hay que jugar y no reventar la pelota.

Bueno del técnico que está para un gediátrico, digo esto sin querer ser irrespetuoso, pero ya no puede dirigir. Su condición física sanitaria no se lo permite, y cuando hace cambios que debieran ser para cambiar, el mareo que tiene es monumental.

Pasó lo que tenía que pasar, con el karma de un estadio, que ya pintarrajeado como está, es un adefesio para lo local y mucho mas para mostrarlo a nivel internacional, muchos lo ponderaran  por cariño, pero íntimamente saben que sin mamarracharlo tanto hubiera quedado mas bonito, aunque esté en el traste de la ciudad.

Mataron a la gente con los precios, y esta les dio la espalda, Panorama completo, con llanto incluido y 6to. puesto en la tabla.   

                                                          Enrique Bello