El mismo comenzó bajo los mejores auspicios, dos torneos de verano ganados frente a equipos extranjeros, dos clásicos también ganados en una semana y aún con el recuerdo del clásico del apertura con aquel gol de Recoba en los descuentos ,y el que seguimos gritando. Dos meses y medio tres clásicos al hilo, apelando a la buena memoria, no hay antecedentes en la historia de esas confrontaciones.
Un entrenador como Alvaro Gutierrez que todavía a nivel local y con 22 partidos dirigiendo, no sabe lo que es un empate, si vivió una sola derrota, algo que se hace hasta difícil creer cuando uno analiza friamente su actuación. Pero el hombre se las ingenió y allí va, calmo, sereno equilibrado, respetuoso y sin dramas. Hace lo que cree conveniente y hasta el momento le ha ido muy bien.
Le llegaron refuerzos, Gonzalo Bueno, Ribair Rodriguez, Cristian Tabó, y le falta un zaguero por el que se trabaja intensamente. Se fueron Calzada y Rafa García, otros se irán en préstamo a equipos menores, le dio oportunidad a una cantidad de jóvenes que no menciono, para no olvidarme de ninguno, algunos con muy buenas condiciones y que tendrán su espacio en el plantel principal.
Mientras esto está en máquina están viajando a Recife en Brasil para un amistoso frente a un equipo local, que seguirá permitiendo ver, como se va acoplando y definiendo un equipo titular para el 5 de febrero fecha del debut en Libertadores frente a Palestino de Chile.
Llamó la atención, algunas lesiones de futbolistas en los entrenamientos, Polenta, fundamental en la defensa y no ha jugado un solo partido, eso preocupa y mucho, Nacho González, que algún día tendrá que demostrar en Nacional, porqué vino al club y no ha rendido por diferentes circunstancias, pero yo por lo menos, de los buenos futbolistas espero, olvidarse de jugar al fútbol no se puede haber olvidado, es un gran jugador, pero los tiempos se le terminan.
Arismendi, que salió pidiendo mas plata en su contrato, enojó a los dirigentes e hinchas porque ya ganaba muy bien, demasiado agrego, para un jugador que vino de dos años de no jugar y Nacional le abrió las puertas, tampoco, y el lo sabe mejor que nadie, es un jugador extraordinario, ni cosa que se le parezca, buen jugador si; pero punto. Se perdió varios de los partidos de preparación y contra Sp Luqueño, se notó claramente. Errores graves que no los paga el jugador ni su empresario, los paga la Institución a la que defiende. Eso es falta de profesionalidad y hay que tenerlo en cuenta para futuras situaciones similares que se puedan presentar.
Ya antes de que terminara el campeonato apertura 2014, en nuestro programa de radio dijimos que Nacional necesitaba un punta punta para todo el frente de ataque y ese era Cristian Tabó en Racing. Los hechos finalmente nos dieron la razón y en una pulseada dura, finalmente llegó a nuestro equipo, ojalá no nos deje mal, ojo no lo trajeron por mi opinión que quede claro, yo solo expresé una opinión con bastante antelación, pero la realidad está hoy.
Sebastián Abreu, que tema conversado, que entreno, que no entreno, que tiene contrato hasta el 31 de diciembre de 2015, otros que dicen que es hasta el 31 de diciembre de 2014, otros hay cláusula para rescindir, todo esto en medio de una baraunda que nadie entendía, el presidente que me dice a mi, no es momento para Abreu. ¿ La pregunta nunca contestada por nadie era, cual es el problema de Abreu ? Que el técnico, que los jugadores, que hay un grupo unido, en fin mil cosas y Abreu en el medio, que se va, que no se va, que se queda en el plantel, de la plata no hablo porque no me corresponde, pero había mucha en danza.
En el anterior comentario escribí sobre el tema Abreu y no cambio un punto ni una coma, tema pesimamente manejado, vaya a saber uno porqué. En una doble competencia como la que se va a jugar, una mano grande puede dar. Tiene 38 para 39, si no juega ahora cuando lo va a hacer, Era un tema que se arreglaba hablando, mirándose a la cara y pensando solo en una cosa, y esa era Nacional y nada mas que Nacional. Abreu es ídolo del club, goleador, campeón, goles clásicos, tiene palco en el Parque Central, el escudo de Nacional mostrado en cuanta cancha del mundo jugó, hizo el gol mas comentado de una selección uruguaya en un mundial que lo llevó al país a la cima del mundo.
En todo este ambiente favorable con alguna excepción como la de Abreu, se ha movido Nacional en los últimos tiempos. PEÑAROL así de grande lo escribo, vive un momento caótico, endeudado, mal humorado por los 17 puntos de ventaja que le sacó Nacional, con una interna política hecha fuego y con presidente sin mayoría, sufiendo todavía la ignominiosa derrota clásica del apertura, de atrás, en los descuentos y con el golazo del chino. Un técnico casi contratado que los deja de a pie, buscan a otro a los bandazos, Nacional le vuelve a ganar esta vez afuera de la cancha con C. Tabó, tienen un desconcierto pocas veces visto, en una palabra dan lástima.
Entonces que hay que hacer; intentar voltear estamentos políticos del fútbol, Consejo Ejecutivo, Colegio de Arbitros, miembros de tribunales, es la desesperada para quedar bien con sus hinchas.
Toda la vida fue así, eso es Peñarol, malos perdedores consuetudinarios, no saben asumir la realidad que les toca vivir. Nuestro Nacional debe estar atento a todos los movimientos subyacentes que se puedan producir, y ojo tienen el apoyo y la complacencia de otras importantes áreas del fútbol, me refiero al sistema que rige los aspectos económicos finacieros del fútbol uruguayo, y no es poca cosa. Un periodismo partidario sufrido por demás, que no encuentra la vuelta para decirle algo positivo a su gente.
Sigamos con la tranquilidad actual, pero con firmeza y actitud para afrontar posibles dificultades, zancadillas van a venir como dice el presidente, no tengan dudas, mientras tanto esperemos confiados sin perder el punto de mira de un presente y un futuro que hoy nos tiene bien plantados.
Palestino el 5 de febrero es la primera meta en Chile, y allí hay que apuntar las baterñias, todos lo sabemos y debemos apoyar con fe. No tenemos un maravilloso equipo, tenemos un buen equipo, sólido parejo solidario y conciente de si mismo, de lo que puede y de lo que no.
Así vemos el actual momento tricolor, el de su rival tradicional y lo que lo rodea para intentar minimizarnos, fiel a un estilo que cada vez, está mas venido a menos.
Enrique Bello
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