El Barcelona de Ecuador, vino y se paró firme, no se si es un gran equipo, pero si se, que es un buen equipo de fútbol y por largos períodos del encuentro bailó a nuestro equipo.
Ya es harto conocido que ecuatorianos, colombianos, peruanos, chilenos y venezolanos, juegan mejor al fútbol que los uruguayos. Esta es una realidad incuestionable.
Ya nos perdieron totalmente el respeto, porque han mejorado considerablemente el enfoque, dándose cuenta que la técnica y los fundamentos con la pelota son elementos excluyentes para enfrentar con mejores posibilidades a todos sus rivales.
Ya vienen acá y se florean, ganan, empatan y pierden, ésto último cada vez menos, dan espectáculo y les importa un comino, la cancha en que juegan, el rival, y la gente en contra que puedan tener. El tema es jugar al fútbol con sentido colectivo, con el concepto arraigado de que mientras la pelota la tengo yo, no la tiene el rival. Se defienden y atacan con la pelota, tocan, son pacientes y cuando tienen que profundizar lo hacen con practicidad y velocidad. No rifan el balón y además le han agregado fuerza para marcar y no dejarse llevar por delante.
Todo este introito para incursionar en el partido Nacional Barcelona, lo primero e ineludible, el arbitraje del chileno Oses, vergonzozo, malo por donde se le mire, hay que decirlo con total honestidad, lo robó al equipo ecuatoriano, que hizo méritos suficientes para llevarse los tres puntos, no le cobró un claro penal a favor ya cerca del final, y lo de Lembo expulsado permaneciendo cinco minutos mas en en el campo, fue poco creible. También es bueno decir que le permitió a varios jugadores ecuatorianos, hacer tiempo en forma desmedida sin tomar las decisiones que hubieran correspondido. Fuimos favorecidos como tantas veces perjudicados.
Nacional es un grupò de jugadores sin brújula, mal dirigidos por un entrenador que desde que llegó a la institución, jamás puso en cancha un equipò titular titular, el año pasado, y éste y con diferentes jugadores. Y eso es muy malo, genera inestabilidad en el plantel, desconfianza entre los propios futbolistas que empiezan a dudar sobre lo que tienen y deben hacer.
Para quien esto escribe, sin conocer una cantidad de detalles de carácter interno, el equipo está mal integrado desde el inicio, mal parado en la cancha,desordenado y de muy mal juego con la pelota en los pies.. Los cambios para cambiar se hacen tarde y para mi manera de pensar, no de la forma mas correcta. Primera aparición pública oficial de nivel internacional y como locales, decepcionante. Así y todo no se perdió, los ecuatorianos furiosos y a las trompadas entre ellos , por no saber ganar tres puntos que tenían en sus manos, actuaciones individuales, mas allá del pésimo planteamiento táctico del chavo Díaz, muy bajas, caso Lembo, Alvarez y Romero en los laterales, un festival para los rivales, Albin, V. Sanchez, Luna, Damonte y el colo Romero no son solución para el medio campo porque son desordenados tacticamente y quitan poquitito a pesar de lo que meten. Así los defensas sufren lo indecible como el otro día, menos mal que Cortéz les arregló un poco la fiesta en base a su velocidad en las coberturas. Alonso no puede jugar de espaldas al arco esperando pelotazos frontales, y a Gonzalo Bueno hay que abastecerlo para que con velocidad desborde y genere peligro. Pumba pumba, poquito para el comienzo. Hay que jugar, armar el equipo de otra manera, falta un 5 que marque y ordene y de mas tranquilidad a la defensa. Dejo para el final al chino Recoba y al loco Abreu, los puso en cancha la gente, y con 74 años entre los dos, sacaron las castañas del fuego para una jornada sufrida en el lindo Parque Central , que no parece darnos suerte en partidos de esta características. Ya no son solo preocupantes, brasileños, argentinos o paraguayos, ahora llega cualquiera y nos complica la existencia. Dicen que el inglés no quiere buen principio, ojalá tengan razón los ingleses, pero el panorama de futuro, en lo que a mi respecta no es muy alagueño, y mientras esta nota está en máquina, Recoba no sabe si viaja a México, porque terminó muy dolorido en la rodilla y Albin se comenta que también, Lembo suspendido, altura, viaje largo y cansador de ida y vuelta, y un entrenador desnorteado, fustigado por la parcialidad en forma cada vez mas creciente, porque no cree en él
Dentro de ese panorama,en pocos días llega un segundo partido muy difícil como visitantes. Como nacionalófilo tengo que transmitir optimismo en una mejora que deberá ser muy notoria,pero también tengo la obligación de ser realista, de entrada nomás se puso difícil la cosa.
Enrique Bello
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