Pero eso no es óbice para que uno como comunicador de las cosas de nuestro Nacional, pueda opinar sobre su actuación pública. Son hombres públicos, y por lo tanto sometidos al elogio y a la crítica.
Es archi sabido que el el elogio los llena de egocentrismo y satisfacción, y está bien que ello suceda, porque están haciendo las cosas bien en la función encomendada.
Pero las complicaciones aparecen cuando entran a fallar, no por que quieran fallar, si son nacionalófilos como cualquiera de nosotros, pero el mal manejo de situaciones puntuales, en un ámbito que no es fácil de transitar, el desconocimiento de muchos temas que hacen a la realidad del fútbol de todos los días, y a todos los vericuetos reglamentarios, agregados al tener que lidiar con intermediarios, ya es sabido yo no los llamo ni contratistas ni empresarios, porque no lo son, no es tarea sencilla.
Si a ello le agregamos futbolistas, entrenadores, médicos, funcionarios de diferentes áreas, tampoco es sencillo ser dirigente. Es mas fácil criticarlos, que elogiarlos, por eso hay que tener mucho cuidado.
Ha sido claro y notorio que en estos 7 meses y medio que lleva la actual conducción directriz de Nacional, en muchas decisiones tomadas, ha dado mas en la herradura que en el clavo. No vamos a entrar en detalles de las mismas porque sería abundar en detalles que todos nuestros hinchas conocen y no vale la pena reiterar.
Solo vamos a hacer referencia a la última, protagonizada por el señor Puig sobre el caso Damonte. Ha sido el asme reir de todo el mundo, incluso del periodismo, con lo colocado en su twitter. Después que la embarró hasta la bandera pidió disculpas. No puede ud señor Puig como dirigente mediático que es, sobre todo en su programa pasión tricolor del que es habitué según cuenta la gente que lo escucha, incurrir en un error del tamaño cometido. Le echó las culpas a Damonte practicamente en exclusividad, cuando los responsables del actual momento deportivo e institucional son todos los jugadores, todos los entrenadores y todos los dirigentes de los cuales ud es cuota parte.
Lo que ud hizo, es la mas clara y contundente definición de lo que nosotros desde distintos ángulos venimos marcando hace tiempo, La mayoría de los dirigentes actuales no saben de fútbol y eso lo llevó a cometer la barbaridad sobre Damonte en una clara muestra del desconocimiento futbolístico en el que están inmersos.
Y no es casualidad sino causalidad, que nuestro Nacional, hoy ande a los tumbos y sin un rumbo que haga vislumbrar que a corto plazo, haya un cambio sustancial en las distintas esferas que tienen, no ya la responsabilidad sino la obligación de dar un giro. Un giro que genere en la parcialidad la sensación de que hay voluntad y capacidad para cambiar un estado de situación, malo por donde se le mire, con errores a esta altura imperdonables en todos los estamentos.
Dicho todo esto con el mayor respeto, pero sin sacarle la cola a la jeringa, teniendo el coraje de expresarlo, como debe ocurrir siempre. Emitiendo opinión fuerte sin lavarse las manos, eso no nos quita nuestro cariño ni adhesión al club, al ser críticos duros sobre lo que está mal. Y esto del señor Puig y sus publicaciones en las redes sociales apuntando a un solo lado no estuvo mal, estuvo re mal y lo dejó muy mal parado, máxime siendo secretario general del club. Ojo esta le tocó a él por ser la mas fresquita, pero hay varios mas que han andado a los bandazos con determinaciones erróneas y no hemos nombrado aquí, así que señor Puig quédese tranquilo, aprenda de su grave error, pero sepa que varios de sus compicuos compañeros, le han errado también como a las peras. Por todas esas macanas hoy los hinchas estamos sufriendo injustamente.
Si hacen el mea culpa, demuestran grandeza, eso no es malo en los seres humanos, piensen y modifiquen mucho de su accionar, son hombres de empresa, profesionales, sepan que para estar en el fútbol solo esas cualidades no los habilitan, hay que conocer el ambiente del fútbol y allí creo yo particularmente, que es donde estamos fallando groseramente, por eso en estos momentos estamos como estamos.
El presidente dice muy seguidamente, pasos cortos, mirada larga, es buena la frase, pero cuidado que la mirada no sea muy larga, y nos conduzca a arrepentimientos tardíos y dolorosos.
La gente de Nacional con la que uno habla permanentemente está de capa caída y muy desilusionada con todo lo que está ocurriendo. Habrá capacidad y rapidez para modificarle su pensamiento.
Ese ya no es tema nuestro sino de los señores DIRIGENTES que para eso los votó la masa social.
Enrique Bello
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