CAMBIO QUE INTENTA CAMBIAR

llegué al Parque Central sobre las 18 horas del sábado 12 de diciembre, imaginaba que como tantas cosas que he  vivido con mi Nacional, esta tampoco iba a ser una mas.
Monte Caseros y Azambuya, esa esquina ya me hizo sentir la primera emoción de una tardecita que se transformaba en noche. Un señor mayor joven en apariencia, a pesar de sus 81 años junto a su hijo se me acercaron, eran  don José y Giovanni Lapachian. Ud. es fulano de tal preguntaron, si les dije, el abrazo desconocido pero fraternal no se hizo esperar. Yo no los conocía, pero ellos si a mi, a través de la radio. Como comienzo de mi jornada electoral, era el preámbulo de lo que llegaría minutos después. La fiesta de colores blanco, azul y rojo en las puertas del parque marcaban con su colorido lo que se estaba viviendo, el respeto, la jerarquía y el señorío, que decían aquí está Nacional.
Entre cientos de saludos y abrazos de gente conocida y de otra que no, fui tratando de ingresar para ejercer el voto.
Mientras caminaba un montón de recuerdos de casi 50 años se empezaron a juntar en mi cabeza, sentí que esa enorme mole de cemento se caía sobre mi; que momento, difícil de explicar.
Yo en 1968 había votado allí por primera vez, nada mas ni nada menos que a don Miguel Restuccia, el mejor presidente que tuvo Nacional  en los últimos 50 años. Traído a la institución para gobernarla, como un desconocido de la Tribuna Olímpica, un temperamental hombre, que vivía cada partido de los tricolores como si fuera él último. Pasional si lo había,sencillo, pero agudo observador e interesado en ver a su Institución en mejores condiciones de las que estaba.
De familia sencilla, trabajaba en UTE, donde llegó a un cargo gerencial, empleado en la administración del Sanatorio Impasa,eran su humilde curriculum para aspirar a presidente.
Pero un montón de personas jóvenes por aquellos tiempos, entre los que me encontraba, fuimos captando en la propia Tribuna Olímpica, que allí teníamos al hombre que haría historia y vaya si la hizo. Es innecesario en este momento traer datos concluyentes, sobre lo que fue la conducción de ese hombre sin parangón, en la era contemporánea de nuestro club. Ganó todo lo que se puede ganar en poco tiempo, a nivel local y a nivel internacional, estuvo 16 clásicos sin perder frente a Peñarol, compró Los Céspedes, concentración que hoy llena la boca de muchos.
Vuelvo a la elección, finalmente y no sin dificultades entré y puse mi voto en la urna, el desfile de gente por los pasillos y los saludos con gente a la que no veía hacía muchos años, me significaban, satisfacción y emoción al mismo tiempo.
Fui por diez minutos, y se me fueron por todo los expuesto, dos horas y media. dentro de un lugar en el que practicamente y por ser de la zona, pasé mi niñez y mi adolecencia. La vida me puso allí y aún hoy la sigo disfrutando mas allá de victorias y derrotas, que no hacen al sentimiento que se profesa.
Al fin pude irme no sin antes saludar y abrazarme con todos los integrantes principales de las listas que pugnaban por ganar la elección. Nadie imaginaba lo que se iba a conocer sobre las 8 y media de la noche.
Cuando llegué  a mi auto, comenzaba el escrutinio, puse la radio y emprendí viaje tranquilo hacia mi lugar de Residencia actual, este Solymar precioso, y sereno que me recibió con tanto cariño, y fundamentalmente silencio.
Así se fue conociendo el resultado, la mayoría de las mesas, rompían con lo que muchos presumían, de  esa manera el Cr. José Luis Rodriguez se posicionaba con el nuevo y flamante presidente del Club Nacional de Footbal.
Algunos hablaron de sorpresa, pero no se dan cuenta que el mundo de hoy y la tecnología es de los jóvenes y estos por un tiempo de globalización son los capaces de romper esquemas ya caducos. Lo tradicional ha sido hermoso para muchas personas de otra época, pero esto de las redes sociales, generó un cambio que como un tsunami le ha pasado por arriba a muchos.
Gente nueva, joven, profesionales con mentalidad de avanzada, liderarán al nuevo Nacional que se nos viene, y con cambios en áreas que parecían inamovibles.
Ojo no llegan para borrar todo de un plumazo, y está bien, primero hay que dialogar, informarse de todo, escuchar que siempre es buena cosa, apelar a la indiscutible experiencia de quien fue el derrotado de la jornada, como Eduardo Ache, y que con altura reconoció su caída.
Muchos dicen que erró en su estrategia, a no comerse la pastilla, perdió, como se pierde en la vida, otros apostaron a la gente, diciendo lo que consideraban había que cambiar en Nacional, porque mucho estaba perimido y errores de conducción, les hicieron perder predicamenteo. Llorar no parece prudente, ahora desde el llano, la obligación es colaborar con quienes ganaron, ahí está el amor por Nacional y no el hambre de poder. Y yo creo que eso va a ocurrir sin ningún tipo de dudas.
A mi preguntan y vos que pensás, y no tengo problemas en expresar lo que siento, el mundo cambia, Cristina K, se va mal humorada y por la puerta de atrás en la Argentina, Maduro contra todos sus deseos pierde feo las elecciones legislativas en Venezuela, Dilma en Brasil sacudida por un cercano juicio político a su gestión, en nuestro país la coalición que gobierna, que no es partido político, se desangra, con errores garrafales que no sabe como hacer para eludir, esconder o minimizar, fundiendo una empresa estatal como ANCAP, algo impensado.
La FIFA y CONMEBOL con la mayoría de sus miembros corruptos, y presos, generando verguenza mundial, porque se sentían dueños del fútbol y se habían intronizado en sus cargos, cerrando las puertas a nuevas generaciones con cabezas abiertas y mas decentes, impidiendo su ingreso a cargos políticos internacionales.
En el fútbol uruguayo desde hace años vienen pasando cosas similares, sin darse cuenta que los pájaros que vuelan alto, cuan caen hacen un agujero en la tierra.
Peñarol desde hace años dominado por una familia, y hablan de popularidad, Liverpool, El Tanque, Defensor, Danubio, otros tantos gerenciados. Nacional iba camino a ello y está mal, se habló de experiencia, y no se dijo que para ser experiente primero hay que ser inexperiente. Yo escuché a Ache decir a Nacional no se puede venir a aprender, y Munúa que está haciendo, y que se hizo con Arruabarrena y con Alvaro Gutierrez. Tenemos equipo decía Eduardo y porqué los demás no tenían equipo, se refería al de conducción. El fracaso de López Rubio en el interior fue catastrófico menos del 20 por ciento de votantes y la mitad votaron la lista 1. Y acá mucha prensa e interna del club le rindió pleitesía durante años casi como el dueño del interior.
Por favor, de futuro hablaron las listas opositoras, el oficialismo jugó su partido con cosas ya hechas, algunas controversiales, las últimas asambleas que fueron tumultuosas y en algún caso de bajo nivel, marcaron como venía la mano.
Y se hizo silencio, mientras los jóvenes revoleaban el poncho y sin gran alaraca trabajaban por un cambio, y no se les respetó.
Las consecuencias están a la vista, y todos pero todos juntos, sin serrucho tienen que revolucionar los cimientos de la Institución. Allí estaremos nosotros, atentos, vigilantes, prontos para sumar y apoyar y controlar a distancia, con el respeto que la gente conoce.
Capacidad hay y de sobra, astucia para moverse en terrenos fangosos, también, inteligencia ni que hablar, pues llegó una hora de cambios para cambiar, ayudemos dando todo, y apuntando a lo grande que es el ley motiv de la existencia del Club Nacional de Football.


                                                  Enrique Bello