En su momento cuando se resolvió y aceptó que volviera N. Lopez para jugar el clausura y la Libertadores, en este mismo espacio nosotros nos expresamos totalmente en contra de su venida. El argumento fue, la forma inescrupulosa en que Pablo Bentancur se lo había llevado del club. Y fuimos firmes diciendo que ese señor debería estar invalidado de seguir negociando con Nacional. Para mi Nacional lo tenía que haber declarado persona no grata y prohibir a los jugadores del plantel ser representados por ese personaje que tanto daño hace al fútbol. Y que hay que soportar escucharlo en reportajes donde el periodismo le rinde pleitesía como si fuera un gran señor. Nicolás Lopez vino a Nacional, perdió el clausura y feo con sus compañeros, que regalaron un campeonato infame.
Cuando llegó el momento crucial en la Libertadores, y mas se le necesitaba, se lesionó, y faltó a los partidos mas trascendentes.
Quedó flotando en el ambiente que no quiso tirar el último penal en la Bombonera contra Boca, mandando a la guerra al pibe Carballo, cuando, él lastimado y todo, había jugado unos minutos y había hecho un par de corridas peligrosas hacia el arco de los bosteros.
Con un período de pases en Europa que cierra el 31 de agosto no había que ser un mago para darse cuenta que se lo iban a llevar después que Nacional lo pusiera nuevamente en carrera y pagándole el sueldo. En España donde estaba a préstamo ni siquiera jugaba.
Ya el negocio con Gorga quedándose con el cien por ciento de la ficha, a todas luces fue malo, Bentancur le dio a Nacional el 50 por ciento de Polenta, que ahora estuvo en controversia si se lo vendían a River Plate argentino, por dos millones y medio de dólares, y que quedó la sensación de que si Viudez llegaba, la duda de si Polenta quedaba o no, nos asaltó a todos. Hugo De León marcó presencia y dijo si por mi fuera yo con River no negocio. También debió pensarse de la misma manera sobre Nico Lopez.
Nunca debió haber vuelto a Nacional si no era por un
campeonato uruguayo completo. Ahora se va, deja a Nacional y a Lasarte con las ruedas para arriba. Llegarán otros, pero marquemos las pautas nosotros, y que vengan por campeonatos enteros y sin cláusulas de salida.
De otra manera seguiremos sufriendo para armar equipos competitivos. Todo muy lindo, pero nos quedamos mirando la fiambrera, sin recibir un peso , eso pienso, y lo peor y mas grave seguimos negociando con un personaje que a nuestro entender, para Nacional ha sido nefasto. Y lo mantengo no de ahora, los que nos siguen tanto en radio como aquí, lo saben de sobra. Es una cuestión de coherencia pero fundamentalmente de memoria.
Enrique Bello
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