No son para tirar las campanas al vuelo, pero algo dicen, sobre todo si tenemos en cuenta como había comenzado el año.
Eliminado y bien Chapecoense de la copa, fue mucho menos que el Nacional actual y digo mas, fue menos que el Chapecoense que enfrentamos el año pasado.
Ya se vislumbró en Brasil, que quien clasificaría sería Nacional, mas allá de los resultados exiguos en los dos partidos, y así ocurrió.
En lo local se debutó contra Torque, un equipo de liga universitaria y hasta por ahí nomas, fue lamentable su actuación y nuestro Nacional sacó tajada de ello ganando sin despeinarse. Como ha sido notorio, se empezó colocando en cancha dos equipos diferentes según la competencia, algo raro de ver comunmente y casi muy poco habitual, pero cada maestro con su librito, Medina conduce el plantel y toma decisiones, que han llamado la atención y generado varios comentarios.
Ojo, la doble competencia para el jugador uruguayo, ha sido toda la vida un karma, no aguanta, y talvéz el cacique que fue jugador hasta hace muy poco, lo haya analizado muy bien; y dijo, tengo plantel grande, con buenos jugadores en lo individual, mas las incorporaciones que llegaron y el hombre se la jugó y le va saliendo bien la movida.
Rampla fue el segundo rival de local y con el equipo de alternativa como lo había hecho frente a Torque, fue a la cancha y le ganó con claridad y buen juego.
Ha quedado claro y en evidencia, ya en la segunda fecha del campeonato, que los dos rivales de siempre, son los únicos que ganaron los dos partidos, en el caso de Peñarol con otros tantos equipos mediocres y pobres en extremo como Racing y River Plate.
Un fútbol uruguayo, triste, gris, adentro y afuera de las canchas con equipos pobrísimos en planteles y entrenadores de escasa jerarquía, que realmente dan lástima verlos jugar.
De allí que tengamos todos las miras puestas en lo internacional, que es lo que da prestigio, llena estadios, genera plata, moviliza gente, etc. etc.
Los aurinegros ya en fase de grupos, los Bolsos expectantes, porque aún le faltan dos batallas. Está Banfield en el medio, antes de buscar el logro tan anhelado. Y está el dinero que el pasaje a la siguiente fase puede generar, no es un tema menor para las menguadas arcas de la institución, que mucho lo precisa para ir acomodando algunas fichas en un tablero económico deteriorado.
Ir al sur de Buenos Aires y jugar en cancha difícil, no va a ser tarea sencilla para traerse algo bueno, el equipo argentino que no anda muy bien en lo local, tiene buenos jugadores y experientes, Dátolo, Mouche, Citanich, Bertolo, Remedi, Cibelli. Ojo es mas que Chapecoense. Nacional deberá jugar un partido inteligente, con el equipo que Medina considera titular, pero desde mi punto de vista, Bergessio, debería ser titular en lugar de S Fernández, y considerar a Gonzalo Bueno que viene pidiendo cancha con fútbol, velocidad y desborde. Es una opinión, observando el trabajo de los dos equipos que ha venido colocando en cancha.
La tengo clara, el que sabe sabe y el que no sabe es jefe. Medina es el jefe, y yo creo que sabe, por ello lo respeto a pesar de las críticas que le hice, en como salió a plantear los dos clásicos del mes de enero, que finalmente perdió y lo pusieron en la picota pública.
Nacional, no a la retranca, jugar para ganar, eso es lo que queremos los hinchas, basta de miedos que tanto daño hacen. Y ojo se puede.
Así pienso yo.
Enrique Bello
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