No deja de ser preocupante ya de entrada, la derrota con Danubio en Jardines por cuarta vez consecutiva. Y aún ganando el primer tiempo, yo diría que bastante bien, sin haber sido una maravilla y con una muy buena actuación de Viudez y buen rendimiento de Arismendi.
Debutó Lasarte en su segundo ciclo en Nacional, y la verdad en la cancha, no se vieron grandes cambios de la mejora en el equipo.
Lo primero que hay que decir, es que falta un nueve de área, pero de área, y lamentablemente a pesar de gestiones que se han hecho, no llegó ninguno y allí es donde se debió haber apuntado, como prioridad. Uno cuando ve esto recuerda a Ivan Alonso que hoy es suplente en River argentino y acá jugaba de galera y bastón. Se permitió que un técnico que ya no está, no lo quisiera en el plantel y afuera con él, y no se si van a agarrar algunos pesos flacos.
Errores como ese se pagan caros, jamás la dirigencia puede permitir que manden mas los técnicos o preparadores físicos. Hay que acordarse del desastre que hizo Iocco cuando permitió a Gesto mandar mas que él, y con esa decisión mal tomada liquidamos del plantel a Victorino y W González y como consecuencia a Nacional.
El propio Lasarte dijo publicamente que a Silveira le faltaba mucho, que estaba aprendiendo muchas cosas y que había que llevarlo despacio. Y contra Danubio lo mandó a la cancha como titular, y ojo no defraudó y fue mal sustituido, pero el técnico, ya de entrada borró con el codo lo que escribió con la mano.
Nacional tuvo vértigo, pero no equilibrio, jugó a mucho pelotazo hacia adelante y a correr, así vino el gol de Viudez, pero para mi no es la mejor forma de jugar. Rafael García podrá dar una mano en alguna circunstancia de expulsión o lesión pero no es zaguero, porque es desprolijo. Que faltó Polenta, si, ya lo sabemos, pero no busquemos justificaciones por favor.
No se generaron chances de gol claras, se sigue sin rematar al arco de media distancia, hasta que no entró Liguera con casi 36 años, no hubo pausa y criterio para jugar la pelota. Los tres goles convertidos, fueron causa de rebotes y no de jugadas concebidas, eso marca lo que es el fútbol uruguayo. Para Nacional aprovechar un corner, o un cabezazo en el área con peligro de gol, es casi una utopía.
Otra cosa, cuando Danubio pasó a ganar el equipo se murió, ya no tuvo respuesta, acusó el golpe como un boxeador al que una trompada lo deja desacomodado, y eso es delicado para un cuadro grande.
Que nos pasa en las canchas chicas, no ganamos en Jardines, no ganamos en Belvedere, no ganamos en el Trócolli, no ganamos en el Viera, no ganamos en el Franzini, cuidado con esto, ya pasa a ser un problema grave, al que hay que ponerle mucha atención.
Yo tomé una decisión que salvo algo muy especial, no voy a las canchas chicas, como lo hice toda mi vida. Varias veces me quisieron robar el auto y eso me superó, otras me lo encontré con las ruedas desinfladas, vidrios rotos y me harté, y ojo fue en todas las canchas. Salvo en el Parque y en el Estadio, en los demás lugares dejar un vehiculo es un riesgo que resolví no asumir mas.
Así que los partidos en canchas chicas los miro por TV, y veo cosas que en las propias canchas no.
Va a ser dura la mano para Lasarte, conformar un equipo competitivo, tiene muchos inconvenientes de integración, y no se le ve seguro en la conformación de un equipo titular.
Cuidado que cuando lo logre no sea tarde, en un campeonato corto.
No sabemos aprovechar patinadas del eterno rival, y siempre estamos corriendo de atrás, ese es un tema en el que hay que profundizar en toda la institución, cuando se nos brindan esos changuí. La gente está muy molesta con muchas cosas y esto recién comenzó, supongo que los dirigentes también harán su mea culpa de errores importantes caso Alonso. La no llegada de un 9 de área y con gol, que en el Nacional B de la argentina hay varios, y no caros para nuestro medio, pero parece que de ello nadie se da cuenta.
Kevin Ramirez no es para jugar permanentemente de centro delantero, si bien salta y cabecea y lo hace con peligro, no es para ese puesto.
Yo me puse a observar el partido con el deseo de ver ganar a Nacional, pero con muchas dudas en la conformación del equipo, posteriormente confirmadas.
Pobre actuación, para muchos días de preparación, y la comprobación mas allá de lo que pueda venir en el futuro, de ver un plantel desbalanceado en varios sectores.
Este botija Sebastían Rodriguez, ya no estaría mereciendo una oportunidad en lugar de un Porras bajo y sin el rendimiento de hace mas de un año, Felipe Carballo, otro que puede mejorar el sector de media cancha. y la vuelta de Polenta que a esta altura como están las cosas, en la defensa de Nacional es Messi.
Dejo para el final, porque no es la primera vez que ocurre, la torpe y absurda expulsión de Arismendi, protestando con un rival por una jugada que este le hizo, que ahora los jugadores toman como una falta de respeto y se molestan tontamente. Ahora quedará fuera del próximo partido complicando al entrenador. Piensa poco este muchacho, que no tenía cuadro, recaló de vuelta en el club y cuando no se había ido muy bien, por declaraciones desafortunadas.
Como ya lo escribí y lo dije por radio, lo reitero, yo no lo hubiera traído de vuelta. Pero bueno ahí está y ojalá le vaya bien, porque yo soy hincha de Nacional y no de los jugadores.
El panorama inicial, no fue nada alentador, hay que barajar y dar de vuelta, lo mostrado ayer no motiva absolutamente a nadie.
Como dice algún grafiti por allí, la esperanza es lo último que se perdió. Sigamos teniendo fe. Es lo que hay.
Enrique Bello
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