Siendo absolutamente consiente de la realidad económica que tiene nuestro club hoy, y por la cual se lucha en forma encarnizada y seria para ir mejorando sobre bases solidas y racionales.
Estoy convencido, no de ahora y creo que los dirigentes y técnicos también, desde comienzo de temporada, que había que brindarle un salto de calidad al equipo principal.
Desde hace buen tiempo, y me voy al año pasado, he venido sosteniendo que con lo que tenemos no alcanza para logros medianamente importantes. Es una sensación observando todo el panorama, no una certeza, porque puedo estar equivocado en relación a otros pensamientos, y lo acepto, no soy obtuso.
Pensando no en ganar la copa, pero si en hacer un papel decoroso, y en ganar el uruguayo, para cambiar la pisada.
Y pensé que con un manager deportivo, ahora con un secretario técnico y con algún dirigente con conocimientos claros de fútbol, se podría reforzar al equipo en lugares que a mi criterio son sumamente necesarios. Otro zaguero, un volante de creación y que sea ambivalente, es decir que a la hora de marcar también lo haga, y un delantero de punta de buen pie y veloz, no otro centro delantero como aparentemente se está buscando y no se encuentra.
Pero al parecer nada de esto se da, Gutierrez sale a la palestra y dice Lorenzetti será el sustituto de Amaral.
Uno no deja de sorprenderse, aún este jugador no ha dicho aquí estoy yo,para rendir lo que se necesita en Nacional.
Es claro y notorio que no hay dinero para lo que se necesita, pero yo pensé que habría ingenio para moverse en un ambiente que reconocemos es difícil y donde los contratistas quieren introducir en los equipos lo primero que les sobra.
Pero las cosas son como son y hay que aceptarlas.
Por lo expuesto en el título, pensé en otra cosa.
Enrique Bello
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