No se ni me interesa saber, cuanto tiempo tiene en las redes la página Decano. Si llegué a darle algún vistazo desde que existe, no creo que hayan llegado a diez las veces y muy por arriba.
Es bueno reconocerlo tiene su gama de lectores que lo siguen habitualmente. No fue ni es mi caso.
Alguna vez me han comunicado que alguna referencia se ha hecho sobre nuestro programa y sobre alguna cosa mencionada por nosotros sin que pidiéramos nada. No tengo idea ni de quienes son sus directores, con eso les digo bastante. Pero respeto.
Hay un espacio al que llaman El Talud donde la gente se expresa sobre diversos temas, que es al que le hemos dado alguna mirada en momentos cruciales de la institución.
Para mi y lo digo sin que me duelan prendas es un espacio que no le aporta nada a la institución, salvo alguna rara excepción, racional y coherente que vale la pena, dentro de lo poco que he leído.
El agravio, la mala palabra, la discusión interna entre los forer, las enormes faltas de ortografía que horrorizan, el insulto y otras barbaridades, flaco favor hacen, fundamentalmente a Nacional. Pero dice por ahí una frase, es lo que hay, no para mi por suerte. Por algo estoy ausente del enfoque general de dicho espacio. Pero tiene su gente eso es indiscutible. A la gente le gusta eso, vivimos tiempos en los que en este país gusta cualquier cosa. Yo nunca me metí con nadie de Decano ni con la gente que escribe. No me interesa. Pero en las últimas horas me han avisado que un tal Jorge Patrone, lo llamo así, porque de señor no tiene nada, me ha agraviado aprovechando el espacio que le otorgaron. Cada cual es dueño de hacer y decir lo que quiera, pero meterse con otra persona que además tiene 56 años de socio de Nacional, 30 años como periodista partidario y dos mil audiciones sobre sus espaldas, en forma honoraria, es inaceptable, por mediocre y mala persona a la que no le da el paño para encarar personalmente a quien agravia porque sabe que se va a encontrar con la horma del zapato.
A la dirección de la página Decano, solicito expulse a esta basura de su participación en el espacio El Talud. Perdón por el adjetivo utilizado pero no encontré otro para juzgarlo, porque mi trayectoria buena o mala, ha sido y es limpia e inmaculada, además de respetuosa. Sería bueno un filtro para algunas barajas mala gente.
Enrique Bello
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