En uno de los peores momentos de su historia, en lo económico financiero, con un pasivo desproporcionado y endeudado por demás, y como si eso fuera poco deportivamente muy mal, con los dos últimos campeonatos uruguayos regalados a su eterno rival en forma poco creible.
Nuestro Nacional llega a nuevo acto electoral el 8 de diciembre próximo, en condiciones que no son las mas adecuadas como para poder revertir un estado de deterioro institucional que hasta no hace mucho tiempo no se vislumbraba.
Una Comisión Directiva que ganó los comicios anteriores por medio de la computadora, no supo administrar bien los recursos y pagó tributo a su inexperiencia, y a una oposición que no pudo, no supo y no quiso ayudar y plantarse como hubiera correspondido, y pensando en que delante de todos estaba el Club Nacional de Football. Por eso hago hincapié en que la responsabilidad del actual momento fue de toda la directiva. Y eso desde mi humilde punto de vista es inaceptable.
Han dejado a la institución en banca rota, endeudada en grado sumo, incumpliendo con la gente que hace cuatro años pagó por sus palcos en el Parque Central y aún no los tiene. Una verguenza total.
Nunca se supo a donde se quería ir, Nacional fue un barco a la deriva donde no solo el capitán fracasó, la tripulación no le fue en zaga y permitió su hundimiento.
Y ahora que, cuatro opciones de gobierno a la cancha, muy heterogéneas todas, no tengo dudas con la mejor intención de cambios radicales y urgentes.
Pero cuando veo las nóminas que integran las listas en algunas de ellas me sorprendo.
Si se llega a este estado de conmoción en el que está el club hoy a diferentes niveles, con dirigentes que tiraron la toalla mucho antes de finalizar su mandato y a muchos de ellos se les ve integrando de una manera u otra las diferentes opciones, llegamos a la conclusión de que algo no anda bien.
José Fuentes un hombre que ya ha estado desde adentro y que busca otra oportunidad, resulta que lleva varias personas con él que son de las mas cuestionadas por ser integrantes de la directiva que se va. Me refiero a Pablo Durán, Daniel Turcatti, María Laura Muxi, el apellido Lambert, Monzeglio y alguno mas que se me escapa. Como se interpreta esto, como continuismo, o como experientes de fracasos que vienen desde adentro, para intentar revertir una situación absolutamente decadente. La verdad por mas que me esfuerzo por entender, me es imposible hacerlo.
José Decurnex. Ache fue su propulsor, se dice de un hombre serio inteligente, viene del mundo empresarial y se habla de sus contactos, Balbi a la vice después de estar cinco años fuera del club, aunque experiencia le sobra. Antonio Palma, viene del cuadro de José L Rodriguez y el que fue uno de los que hizo todo, para llevarlo a la presidencia, le dobló la mano en las primeras de cambio, lo abandonó y ahora no existen dudas de que quien se lo llevó a Decurnex, fue Ache, y allí va en un puesto preferencial de la lista del Ingeniero. Otro de la directiva de Rodriguez integrante de la minoría, y suplente en las prolongadas ausencias de Ache durante mucho tiempo, fue López Rubio, y ahí está también en los primeros planos. Sus méritos debe tener. Orellano, también de la minoría de la directiva de Rodriguez, integra la lista. Vuelvo a decir lo mismo que con el anterior, conociendo como conozco en profundidad la interna política de Nacional, me cuesta entender.
Atilio Narancio, nieto de un prócer, salió a combatir, con las armas que tiene, lleva a Magic como su compañero de fórmula, un hombre duro que tuvo sus grandes controversias en Nacional a favor y en contra, pero que busca otra vez un lugar.
Y por último dejo al señor Giuria, que salió a jugar su partido con J Gomensoro y con un hacedor como Morgan Martinez para intentar catapultarlo nuevamente a conducir todo lo atinente al Parque Central, como lo hizo de la mejor manera desde sus comienzos.
Todos saben del crítico momento que se vive, y hablan de 30 , 60 y 90 días para tomar las grandes medidas correctoras, que pongan a Nacional nuevamente en un lugar de respeto y consideración para que vuelva a generar la credibilidad perdida.
Nadie pone en tela de juicio, de que todos son nacionalófilos de verdad, que quieren al club, pero yo creo que solo con eso no alcanza, para estar en el fútbol, hay que conocer de fútbol, no como entrenador o habiendo sido futbolista, hay que conocer la idiosincracia de lo que es el mundo Nacional desde su nacimiento. Pero hay que conocer, los entramados subyacentes que se mueven dentro del fútbol uruguayo. Y allí se ha fracasado hace largo rato.
Y yo me permito decirlo con toda contundencia, que en las cuatro listas no son muchos los que tienen esa condición.
En estas últimas semanas se han dicho muchas cosas, algunos fueron para atrás y para adelante, las respuestas de unos a otros no se hicieron esperar, cada cual acomodó el cuerpo como le convenía. Eso es política cuando se busca un triunfo, y está bien, es respetable. Recta final, faltan cinco días, para el comienzo de una era crucial, los problemas económicos acucian, pero la gente mira lo deportivo, todos los presidenciables dicen tener las soluciones. Unos hablan de Alonso, otros de Recoba, otros de Enriquez, unos de que Medina está muy cuestionado por no ganar nada, ni un clásico de cinco, otros como Decurnex, que me sorprendió en la hora de los deportes, diciendo que si gana él, queda Medina, porque hay que seguir con los procesos. Está brava esa afirmación cuando venimos de fracaso en fracaso. Pero bueno cada maestro con su librito, yo creo que Medina no justifica otra oportunidad, después de lo vivido recientemente.
Ahora se juega al achique de gastos, cuestión fundamental, Se oyó hablar de que en 2019 ingresarán al arcas del club, unos 15 millones de dólares, pero también se dijo que ese dinero ya está comprometido, por diferentes razones de compromisos contraídos.
Allá iremos a votar, el interior marcó pautas, de que la gente se interesó por su institución, mas de 2500 socios, ya se expresaron en las urnas. Es el momento de los montevideanos, será otra jornada de reencuentro, de enorme cantidad de socios, de fiesta cívica buscando todos, lo mejor para este club lleno de glorias y que hoy por esas cosas del destino, y por pésimas gestiones, no de la última solamente, sino de varias a la fecha, está hoy como está.
Un futuro complicado nos espera, sin duda alguna, soluciones mágicas no existen, pero este mes de diciembre y primeros días de enero de 2019 serán cruciales para mover cimientos que la erosión de un tiempo no muy lejano nos dejó.
Yo quiero ganar en la cancha, jugando al fútbol y poniendo corazón cuando se necesita. La frase de Ache que tanto ha molestado de varios años a esta parte, de que hay que ganar en todas las canchas, ya lo dijo y muy bien el Dr. Alejandro Balbi, no la usemos mas, porque nunca cayó bien en el entorno del fútbol, por el contrario le hizo bastante mal a Nacional.
Enrique Bello
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