domingo, 26 de febrero de 2017

NO SE COMAN LA PASTILLA

En una semana que fue para el olvido en Nacional, con equivocaciones de todo tipo en el asunto Amaral. Muy mal manejado por todas las partes intervinientes y yo pongo como principal responsable a Fonseca, con sus ya archi conocidas actitudes, que su nivel intelectual no le permiten resolver los problemas en que está involucrado como intermediario de futbolistas.
No en vano ya se le han ido de su égida cantidad importante de jugadores que el manejaba.
Yo quisiera saber el nivel educacional, de estudios y que curriculum tiene para realizar la tarea que desarrolla, amasando fortunas de dinero. Como lo conocí de jovencito y lo traté, me asaltan enormes dudas, sobre quien es hoy Fonseca, y como llegó a manejar su imperio. 
Este Fonseca que se cree que hablar de ética, es ir a un supermercado y pedir dos litros o dos kilos de algo y el tema no es así. El presidente Rodriguez, dijo Fonseca es de Nacional y con él nada malo nos va a pasar, palabra mas palabra menos. Yo hace rato no pienso lo mismo y lo he fundamentado, acá y en la radio, así que estoy tranquilo con mi conciencia. 
Se que con los intermediarios hay que estar bien relacionado, así lo han expresado infinidad de dirigentes, en lo personal, mas allá del mal necesario en que se han convertido, no comulgo con sus procedimientos, que son en la gran mayoría de los casos, de absoluto manejo mercantilista, sin importarles la gente  que los rodea. Por eso lo del título, No se coman la pastilla. No es todo oro lo que reluce, en estas operaciones.
Errores de procedimientos, y de formas marcaron una semana tricolor impensada, que sacudió a toda la colectividad, gente afectada Lasarte, los preparadores físicos, El Dr. Barboza, totalmente dolido por ser ignorado, el propio gerente deportivo Alejandro Lembo, ni enterado de lo que estaba ocurriendo. 
Fonseca, y su verborragia desordenada, ya demostrada, no fue capáz de decirle al presidente, mire, que vengan a la reunión Lasarte, Tulboviz, Lembo, el Dr. Barboza, y no envolver y perturbar a José L. Rodriguez al que enredó en una madeja de la que éste por hombre sano, no supo salir.
Consumo final negativo por donde se le mire, Amaral a Maldonado treinta días, después a tercera, no al plantel principal, y por último Coito, técnico de la sub 20 que dijo, si no juega no va a al mundial. Quien lo vende, peteco y con una cantidad de kilos de mas, quiero ver y ojalá se de, lo vendan como pareció que era este el momento, y su mala forma física lo impidió.
Mientras esto ocurría, Peñarol estuvo de fiesta toda la semana, se preparó tranquilo para jugar con Wanderers, fue al Viera, lo bailó, lo pesteó, lo vapuleó futbolisticamente y lo goleó en el prado. Ojo, no fue un pae a Los Aromos y les hizo un sarabat, nada de eso, les vino bien que se hablara poco y nada de sus desastres anteriores, y frente a un equipo bohemio, que fue un flan en todas sus líneas, jugaron su mejor partido en mucho tiempo, fue causalidad, NO, fue casualidad, ahora el periodismo está loco de la vida y hablarán toda la semana de una espectacular actuación. Cuando un equipo se equivoca tanto del comienzo al final, no puede pasar otra cosa como la que pasó en el Viera. Y vaya si es cierto que nuestro Nacional con sus desvaríos de la semana contribuyó en grado sumo para una recuperación aurinegra, para mi ficticia y sin sustento.


                                                          Enrique Bello

No hay comentarios:

Publicar un comentario