Cuando ayer me retiraba del Parque Central, de cabeza gacha, en silencio, desilusionado y agrego abatido, miraba a la gente retirarse, casi de la misma manera que uno, no entendiendo o si, lo que se está viviendo por estos tiempos en el fútbol uruguayo.
Antes que nada decimos que esto, es responsabilidad de muchos protagonistas, del fútbol en primer lugar, y me refiero a dirigentes, inmersos en la mas grande mediocridad, ineficacia e ineptitud para resolver con el máximo criterio los grandes temas en los que están involucrados.
Comité Ejecutivo, Mesa Ejecutiva, dirigentes de los clubes , once por cada institución, mas sus suplentes respectivos, delegados, comisiones de seguridad, de diciplina, comisión de aquí y de allá, que se reúnen y no resuelven nada como la gente.
Tampoco se salvan las autoridades de gobierno, Ministerio del Interior con Bonomi, Vazquez y asesores a la cabeza, que han dado mas en la herradura que en el clavo. La policía, cersenada para proceder, con la dureza de una represión que ya se hace imprescindible, para atacar el problema de fondo, que no se solucionará con cámaras de identificación facial. La policía debe volver a trabajar al fútbol, adentro y afuera de la cancha como lo hizo siempre. Antes veías un policía que se te acercaba y el chucho por no decir una mala palabra, era tamaño baño.
La policía generaba respeto, un respeto que hoy, quienes los mandan, les quitaron, y así estamos en un estado de anarquía en el que nadie encuentra soluciones, por la sencilla razón de que la palabra represión fustigada en dictadura, le molesta al actual gobierno.
Pero acá hay algo muy importante, el Presidente Tabaré Vazquez, dijo en su momento, sacaremos del forro y de los fundillos, a quienes están arruinando el fútbol uruguayo.
Bueno señores, les llegó la hora, esto no da para mas, con las medidas tomadas hasta ahora, corrieron a la buena gente de las canchas, con el sistema de venta de entradas, absurdo por solemnidad, cada vez las canchas mas vacías, dificultades de todo tipo y tenor para conseguir una localidad.
Complicados ingresos a los escenarios, con regulaciones mediante cédula de identidad, seguridades de los clubes en lugar de policías pesados, para evitar excesos como el ocurrido en el Pque Central.
River Plate en vez de pensar en mejorar su equipo que es un desastre, pide los puntos. Cartón lleno.
La suspensión del partido, fue correcta y de carácter gremial.
Vendrán en próximos días, todas las repercusiones. Yo no creo mas en las determinaciones que surgen desde los distintos órganos de la AUF, no generan ninguna credibilidad porque la payada está a la orden del día.
Nacional, peleando con la remodelación del Pque, ha dicho que la seguridad estaba controlada, pero quedó demostrado que al mejor cazador se le escapa la liebre.
Ya tiene antecedentes por lo que creo vendrá alguna suspensión para nuestra cancha, no creo en la pérdida del partido.
Consumo final triste, desolador, genete que llegó al partido después de muchos kilómetros, muchos otros que no vuelven mas. Yo sigo esperando la orden a la policía para que haga lo que hizo toda la vida, y si hay que meter garrote al que no se comporta como debe, pues actúen muchachos, que ya no se les escapó una tortuga, es peor que eso se les escaparon todos los elefantes y ya es mucho decir.
Enrique Bello
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