miércoles, 19 de septiembre de 2018

ASAMBLEA EXTRAORDINARIA

El 4 de octubre, y yo estoy casi seguro que no me equivoco, se producirá un hecho en Nacional inédito en la historia de la institución.
Un grupo identificado como los guardianes de Nacional, muy sugestivo el mismo, consiguió las firmas necesarias para que la directiva convoque a una Asamblea Extraordinaria. Para tratar varios temas que en los últimos tiempos han sido muy candentes y según el grupo mencionado, muy poco claros, como para dejarlos en silencio y sin explicación. 
A pocos días de cerrar el último balance y memoria anual, cuya fecha es el 31 de octubre, y que se presenta cada año a fin de noviembre a consideración de la masa social, no hay antecedentes como el que se va a producir el 4 de octubre.
Ya lo digo hoy, va a ser una asamblea pesada pesada de verdad, porque es claro y notorio que nadie encara una situación así, si no es con la intención de apretar clavijas, preguntar a fondo y sacar a luz muchas dudas generadas con diferentes situaciones.
Llámese por ejemplo, transferencias de juveniles, en cifras muy bajas para las arcas del club, desprotegiendo el capital de formativas, que tanto cuesta mantener. La relación con el empresario Pablo Boselli, muy cuestionada por la forma en que se ha movido para llevarse y manejar jugadores jóvenes, llevándose la del león y dejando migajas a la institución sin que los futbolistas hayan llegado a primera división.
Hugo de León ha marcado presencia sobre este tema en los últimos días, y lo hizo en forma muy dura diciendo que Nacional tiene que vender en tres años por doce millones de dólares y solo lo ha hecho por tres o cuatro, generando un desfasaje de ocho millones que hoy se están sintiendo duramente. Y eso que Hugo comenzó apoyando a esta directiva, y ahora sacó la lanza, sin miramientos. Cuidado porque su gravitación es muy grande.
En lo personal hace ya mucho tiempo me ha llamado la atención que Nacional utiliza desde hace varios años la misma marca en su indumentaria. Averiguando sobre el tema pude saber que en la última licitación una empresa, que no voy a nombrar por razones obvias, habría presentado mejor cotización que la que hoy viste a Nacional, pero que al igualar esta, la oferta, sigue vigente el contrato con la misma y que viene de tiempo atrás.
En lo personal, por conocer en profundidad este tema de licitaciones, porque trabajé 25 años con el mismo, esto de la igualación de ofertas no me gusta y en mi concepto no debería consentirse bajo ningún punto de vista. Porque si no, para que se llama a licitación. No damos bolilla a nadie y resolvemos a nuestro antojo, y al que le guste bien y al que no le guste mala suerte. No es así la cosa. Transparencia, y  buen accionar se manejan de otra manera. Ah y se de que hablo, porque fue mi labor principal en mi vida personal y conozco muy bien todos los procedimientos  que deben llevarse a cabo para cualquier contratación. Ya sea en el ámbito público como en el privado. Con alguna pequeña variante, ambos son de similares características. 
Evidentemente va a ir mucha gente a esa asamblea, el pasivo enorme, que va a quedar para la próxima directiva. La situación económica financiera preocupante, el endeudamiento, el Parque Central y sus enormes vaivenes, en la construcción para finalizar obras en ejecución. Anunciadas con bombos y platillos para inaugurarse el 14 de mayo pasado, y no cumplidas. y el agregado de un desbarranque deportivo. Dejando puntos en las tablas, y pérdida de posiciones en un campeonato uruguayo que no está perdido ni mucho menos, pero que si está comprometido, por múltiples errores a todo nivel.
Nacional en este especial momento, debe sincerarse, dar explicaciones a la masa social sobre todo, pero todo, lo que no dice ni ha dicho, y que nosotros conocemos en profundidad, sobre una interna que ha sido feroz, con divisionismos, dirigenciales y funcionales, que  han deteriorado, al club, por lo que nosotros hemos dicho durante años, un hambre de poder que acalambra.
Terminemos con esto que tanto nos daña, a los que queremos de verdad al club, y actuemos con sensatez en una hora crucial.
Serenidad y señorío mas allá de la firmeza para preguntar a fondo y que las respuestas sean documentadas con la verdad, tanto escritas como verbales. Queda dicho.
Basta de ocultamientos, hay que hablar y contar todo. Una nueva conducción del club se aproxima y no se le puede dejar tanta complicación, todo lo contrario, si es que queremos hacer las cosas bien. Yo por mi manera de ser y actuar es lo que deseo y lo expreso, dando la cara siempre y firmando con responsabilidad cada nota
 que escribo.

                                                                             Enrique Bello


                                                                       


                                                                            





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