viernes, 5 de octubre de 2018

ESTERTORES DE UNA ASAMBLEA

Tal cual lo presumía antes de la misma, que por suerte fue correcta en general, no dejó cosas realmente importantes para la institución.
Ya lo primero que me generó grandes interrogantes, fue que la misma se generó con 1500 firmas aproximadamente mas o menos, y los asistentes sumaron 400 socios, algo mas del 25 por ciento de los firmantes. Allí ya hay algo que no cierra. Si firmaron tantos por lo menos el ochenta por ciento debieron estar allí. 
Hay dirigentes que votaron una cosa, otros que no la votaron, otros como palquistas se enojaron y se fueron, otros dirigentes dijeron que la asamblea fue positiva. Se dice que hubo quema de cubiertas en las afueras, gente con cara tapada, pero por suerte no pasó nada anormal, que por lo menos se conozca. Y eso es cosa buena.
Navascuez hizo una alocución, tratando de informar a la gente sobre el protocolo pedido para divisiones juveniles, y las dificultades frente a FIFA y CONMEBOL. algo que se aceptó por los asambleistas. El Parque Central hace rato en el ojo de la tormenta, fue motivo de controversias por el déficit en que está sumido. Se preguntó por gastos excesivos y el pasivo, y como fin de fiesta, la ruptura de relaciones con el contratista Pablo Boselli, que ha generado los mayores comentarios, porque se metió a Nacional en un brete no fácil de resolver.
Es sabido que si bien la asamblea tiene potestades, también las tiene la directiva en muchos temas, y ahora vendrán reuniones con el contratista, y a lo mejor hasta con los padres de los botijas que este maneja, de lo que creo debió haberse hecho antes de la asamblea, para explicarles con claridad, lo que podía acontecer en la misma, y ver así la posición de los mismos. 

Como síntesis  de todo esto, gusto a poco es lo que quedó como consumo final, es con la impresión que me quedé. Nada trascendente parece haberse logrado a dos meses de las próximas elecciones. Hubo mas ruido que nueces y nada quedará en la historia del club como para recordarla. 
Aclaro bien, para que se me entienda, estoy en contra de todos los empresarios de futbolistas, pero llegaron para quedarse y lucrar con las instituciones. Estas lo permitieron, cada una sabe el porqué. Pero Boselli no es el único muchachos, y Bentancur, y Fonseca, y el Paco y varios mas, quedaron por el camino del amor. De esos ni se habló y nos masacraron durante años. Faltó memoria. El tema no era con uno solo, por eso como dice el dicho popular, murió la flor. 

                                                                         Enrique Bello

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