Desde tiempos inmemoriales sostengo, que los jugadores de fútbol, y obviamente me refiero especialmente a los de Nacional. No son mas hinchas de la institución que cualquiera de los que queremos al club de verdad, con amor y sufrimiento pero con cariño y devoción. Los que estamos siempre, con frío, calor, lluvia o todo tipo de inclemencias, siempre con la finalidad de alentar, esos somos parciales auténticos de la institución.
La nota la hizo Martín Charquero en la 890 en la tarde del lunes 8 de octubre, y su repercusión ya salió en la prensa escrita de este martes 9.
El protagonista de la misma fue Alfonso pacha Espino, entre varias de las cosas que dijo, sobre su relación con el intermediario Pablo Boselli recientemente cuestionado en la asamblea extraorinaria, expresó que a él lo sigue representando ese contratista.
Pero lo mas resonante y que me lleva a este comentario, fue que al vencer su contrato a fin de año se quiere ir a un cuadro mejor.
Mirá vos que macanudo Espino, ya se olvidó de lo que ha sido Nacional para él, y dice muy suelto de cuerpo se quiere ir a un equipo mejor. Si se será verdad, cuando digo que los jugadores son hinchas de su bolsillo y no del club en que juegan, el que los recibió, el que les dio cobijo, alimentación de deportista, controles médicos, preparación física, buen dinero, conocimiento y fama y son capaces de expresar, me quiero ir a un equipo mejor.
Conmigo, te cavaste la fosa Espino, no tolero declaraciones como esa, ojalá te vayas y no vengas nunca mas, no lo mereces, y pensar que yo tenía otra opinión de vos, muy distinta. Nacional negociará con Boselli algún resarcimiento, que con seguridad serán migajas.
Esta va a ser la primera gran consecuencia negativa del mal manejo que se hizo por parte de los guardianes, apuntando a un solo empresario, cuando habían varios mas en la bolsa, para fustigar con dureza por sus feos procedimientos.
Ojo esto que digo sobre Espino, va para todos los futbolistas de Nacional, que no fueron, que no son, ni serán mas hinchas de Nacional que yo. Estoy profundamente indignado con las declaraciones de Espino, que entró como un carlitos en las garras de un periodista, que lo llevó de la mano, al enchastre público.
A los hinchas de Nacional me dirijo, observar con detenimiento estas cosas, no ser adulones jamás de los jugadores, nosotros somos de Nacional institución, no de los jugadores, que para la tribuna se besan el escudo y después según sus conveniencias personales que pueden ser legítimas, salen a la luz pública con declaraciones como la de Espino, que lastiman la sensibilidad del que siente al club con el corazón.
Imagine alguien, un jugador de Peñarol, diciendo una cosa de este tenor, lo cuelgan del obelisco.
Enrique Bello
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