EMPATE CON SABOR A POCO

Comenzó un nuevo campeonato uruguayo, y Nacional como cuando quien esto escribe lo presumía, empató, pudo ganarlo y casi lo pierde. 
Primer tiempo para el olvido, jugando de la manera que lo hizo Nacional no puede aspirar a nada. Línea de cinco, medio campo con Arzura y Carballo marcando y mal, solo Lorenzetti intentando jugar al fútbol y que alguien lo entendiera. Sin desborde por las puntas y con dos hombres adelante que se chocaban entre ellos, S Fernández y Rivero, vimos lo que vimos en los primeros cuarenta y cinco minutos. El gol de Liverpool ni en una cancha de barrio se ve, una desprolijidad tremenda en la marca, dejando un rival solo para convertir en el medio del área.
Venía fea la mano para el segundo tiempo, pero la entrada del chori Castro para que Lorenzetti tuviera con quien dialogar, mejoró, y ya con Liverpool recostado absurdamente para ellos contra su área, Nacional lo fue arrinconando a pelotazos y centros, con poco fútbol pero con otra disposición anímica. Bava se transformaba en buena figura descolgando centros, sacando con los puños y parando alguna pelota debajo del arco.
Y cuando ya el reloj daba sus últimas vueltas, llegó el merecido gol del empate por parte de Rivero, que hay que decirlo honestamente, acomodó la pelota con la mano derecha y la mandó al fondo de la red. Como tantas veces te quitan ayer te dieron, así es el fútbol.
Pero Naconal que tendrá que mejorar muchísimo no merecía perder. 16 corners y no se sacó una sola ventaja de los mismos, hay algo que falla, Nacional es un equipo bajo en estatura, y es un debe, Liverpool de contra golpe tuvo varias y no las concretó porque Conde volvió a lucirse.
Un empate en el inicio, jugando mal primer tiempo y un poco mejor segundo, con el rival metido dentro de su área sacándola para cualquier lado, no es un buen resultado. Ya comenzó no estando primero en la punta y a correr de atrás. 
Me pregunto esto que vimos, es lo que esconden a puertas cerradas en los entrenamientos, vamos muchachos, no nos engrupamos mas.
Gusto a poco, lo mejor lejos Lorenzetti, sabe jugar al fútbol, tiene panorama de cancha, es rápido física y mentalmente, mete pases en forma correcta, es seguro con la pelota en los pies, lee el partido, ahora hay que entenderlo, es distinto al resto juega a otra cosa.
Consumo final, ni chicha ni limonada, vendrán algunos cambios que cambien, ah y no se olviden que hay que tirar al arco, no con un rival adelante, que alguien le explique a los jugadores que la materia es impenetrable.
Volvamos a lo tradicional sin inventos raros, línea de cuatro, tres volantes y tres delanteros, no demos mas vuelta al queso. 

                                                                       Enrique Bello