FINALMENTE COMIENZA

Es otro campeonato uruguayo, con el torneo apertura. No sin dificultades de todo tipo. Clubes fundidos, algunos entrenando por su cuenta fuera de las instalaciones, sin su técnico y a la que te criaste. Y seguimos hablando de fútbol profesional, con plata adelantada a los clubes que lo pidan, para pagar deudas absurdas contraídas por sus pésimos dirigentes. Dicen que les pedirán garantías de pago, quiero ver si finalmente cumplen.
En ese ambiente de deterioro generalizado, de pobreza futbolística, Nacional y Peñarol arman equipos presuntamente superiores para ver cual de ellos gana otro campeonato para su estadística, mirando para un costado las penurias de sus rivales.
Y así transcurre la actividad con la gente harta de ver lo que pasa en su derredor, que mirado friamente es deplorable.
Ya aburre todo lo del fútbol uruguayo, ya tener que ver y oir la trasmisión de Tenfield porque no hay mas remedio y ahora con Sonsol y Scelza juntos, es una tarea super insalubre.
Ya el interés por ver el fútbol uruguayo está en su mínima expresión. Caro en los precios de las entradas para lo que se muestra, muchas canchas con instalaciones para los aficionados muy precarias. Vestuarios y baños impresentables. Equipos con jugadores, muy veteranos y de vuelta o jovencitos que recién comienzan. Entrenadores timoratos, cuidando su chacrita y pensando en no perder para mantener su puesto. Dirigentes buscando el pelo a la sopa para reclamar puntos en la liga. Para muestra sobran varios botones.
Recaudaciones a pérdida, equipos no queriendo jugar de locatarios por esa razón. Arbitrajes deplorables y llenos de polémica, fustigados por quienes se sienten perjudicados aveces con razón, la mayoría sin razón. 
Aplazamientos de partidos por la actividad internacional de varios. 
Mientras tanto Bordaberry  que demostró en poco tiempo que es mas inteligente que todos los ineptos que han puesto al fútbol de rodillas y en banca rota, lucha denodadamente por hacer las cosas como se debe. Pero con las contras de los varios serviles de Tenfield, que siguen defendiendo lo imposible, muchos periodistas incluídos que no tienen escrúpulos de ninguna naturaleza por su involucramiento laboral con la empresa y a sabiendas de que lo que hacen no es lo correcto.
Mientras tanto la AUF logró poner en vigencia un nuevo estatuto después de cinco años de ineficacia total.
Ya hay un Congreso integrado por todos los estamentos del fútbol, lo que molestó a muchos y ahora falta el reglamento de elecciones y la designación de nuevas autoridades que sustituyan a la intervención de FIFA. 
Si tuvieran dos dedos de frente, Bordaberry debiera se el nuevo presidente de AUF, por capaz, inteligente, trabajador, honrado y serio en todos sus procedimientos.
Eso aún está por verse, porque donde la incapacidad y el entregamiento repugnante de muchos clubes, al poder del dinero.

                                                                   Enrique  Bello