Son profesionales, entrenan dos horas por día, ganan dineros fuera de contexto para lo que hacen, en relación a cualquier actividad normal, e igualmente viven lesionados en momentos cumbres y cuando mas se les necesitan.
Algo anda muy mal en este tema, que es general pero yo me refiero a los nuestros , los de Nacional. Acá da toda la sensación de que hay que apretar clavijas desde todos los estamentos del club, llámese dirigentes, entrenadores, preparadores físicos y la propia sanidad del club. Así no camina la cosa.
Se vienen partidos decisivos, en la parte futbolística, pero también en la parte económica, tan necesaria por estos tiempos.
Un panorama absolutamente desalentador, preocupante y que ya no tiene margen para el error o equivocación y menos para el cuidado primero,de los futbolistas y después de todo lo que hace en su derredor. En tiempos pasados los jugadores no se lesionaban como hoy. Un tema profundo que merece un análisis a fondo y rápido antes de los arrepentimientos y justificaciones tan comunes, de todos los protagonistas para cuidar su pellejo.
Terminemos de una vez con estas comedias, de ecografías, resonancias magnéticas, por pubalgias, desgarros, tirones, contracturas, esguinces, de tobillo y rodilla. Digamos basta y ejerzamos un control mas estricto para todo este tipo de situaciones que a los hinchas ya nos tienen hartos.
Enrique Bello
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