AL GOLPE DEL BALDE

Tres puntos en quince, último en la tabla, derrota con Danubio, y cayó Dominguez, duró 81 días, su conducción fue muy deficitaria porque no conocía al plantel que él no conformó en su totalidad y tampoco conocía a los rivales que debía enfrentar a nivel local.
Como lo vinimos sosteniendo en varios comentarios anteriores a éste, debía ser cesado como finalmente ocurrió, no dio la talla para dirigir a Nacional. No es el primero ni será el último.
Pero hay que profundizar en toda esta temática, el presidente dijo hace pocos días, Dominguez es y seguirá siendo el técnico de Nacional. Se le quemaron los papeles al número uno de la institución, que quedó muy mal parado ante la opinión pública. 
Destituyeron bien a Dominguez, y con Alonso que. Gran responsable de su llegada y de la de varios jugadores del  actual plantel. Debió dársele de baja junto con el entrenador, los errores suyos han sido también muy importantes. Porqué sigue perteneciendo al club en un cargo que nunca se ha podido saber con certeza que es lo que hace, que por otra parte debe ser oneroso.
Difícil entenderlo, porque nadies habla nada sobre él.
Primer punto concluído Dominguez afuera, pagaba 2.40 su destitución que no costará dos pesos, en este momento de crisis.
Pero lo trajeron con bombos y platillos, sin el mas mínimo antecedente que lo justificara, por la sencilla razón de que había que innovar, y hacer algo distinto. Y por no saber de fútbol algo imprescindible para estar en el fútbol y hacer las cosas bien. Consumo final fracaso estrepitoso y determinaciones rápidas hechas a los bandazos sin el menor análisis de nada. Hacen que en pocas horas contraten al buen tipo que es Gutierrez, que tiene algún pergamino con Nacional, pero que en su momento también le dieron el adios por resultados negativos. No se donde ha dirigido desde que se fue de Nacional hace cuatro años.
Pero el tema medular por lo menos para quien esto escribe, no es la llegada de Gutierrez en un momento crucial, sino que Gutierrez es la cara contraria a lo que se estableció para la contratación de Dominguez  con todas las connotaciones que ello trajo aparejado. Dominguez y Gutierrez como entrenadores son el agua y el aceite, entonces el proceso y el proyecto en que quedaron. La coherencia en la decisión se fue al diablo por los resultados deportivos. 
Uno lee las redes sociales y las opiniones son diversas, unos apoyan otros critican, así es y será siempre.
Hagamos memoria, Gutierrez fue un gran entrenador de Nacional, por su manera de plantear y entender el fútbol. ? Yo creo que no, que el dirigió el fútbol como lo jugó, no siendo un dechado de virtudes, fue un fogonero del medio campo, marcador y raspador, pero futbolísticamente no fue un dechado de virtudes técnicas.
Lo primero que hay que decir que es un hombre de Nacional como nosotros, buena persona, equilibrado, que conoce la interna y al club en general. Pero que llega para tomar un equipo prendido fuego, con una interna que no pasa por su mejor momento, con una dirigencia absolutamente desnorteada para resolver y tengo algunas dudas si no con algún divisionismo después de 90 días de conducción. Me baso para decir esto, en el silencio sepulcral existente por parte de la mayoría de los dirigentes. Uno interpreta las cosas aveces de una manera aveces de otra.
Yo no pongo ni saco técnicos, no lo hice, no lo hago y no lo haré, salvo que me pregunten una opinión, o algún comentario aislado y mano a mano con algún dirigente, pero opinión nada mas.
No juzgo la llegada de Gutierrez, que ya me adelanto a decir no la tendrá fácil, esperaré su trabajo y sus determinaciones, no se si su carácter está en condiciones de generar un revulsivo a nivel de un plantel que él no eligió. Tendrá que armar con lo que tiene un equipo que gane, y esté motivado para ello.
Pero si de algo estoy ya muy convencido que en Nacional por lo menos a nivel deportivo no están claras las cosas, y no se sabe lo que se quiere. Actuaron y resolvieron muy mal de entrada y ahora la solución pretendida es de urgencia.

                         ES  AL  GOLPE DEL  BALDE

                                                               
                                                                        Enrique Bello