Comenzó hoy en este día del trabajo, pero no de sindicalistas de pacotilla que viven para ellos imortándoles un comino el pueblo al que usan y lo peor éste se deja usar.
Es el mes en el que la historia le manda a la Institución tricolor, salir campeón.
Los que lo fundaron para beneplácito de un país y de una colectividad que lo tomó para si el 14 de mayo de 1899, surgido de la inteligencia de auténticos próceres del deporte.
Nos legaron un pasado y un presente permanente de gloria, bajo la bandera de nuestro héroe don José Gervasio Artigas.
Y allí va esta institución de linaje mundial, cargada de gloria y de triunfos maravillosos, siguiendo con su desarrollo permanente en la búsqueda de seguir cumpliendo sueños edilicios y deportivos que lo han hecho grande en el mundo.
118 años auténticos, sin mentiras, sin inventos truchos para querer ser los que otros si, pero que intimamente saben que no.
Este es el Nacional que nos cobijó en estos casi 55 años en sus registros sociales, por algo será. Por sus colores. el blanco de la pureza, el azul del cielo y el rojo de la sangre que fluye por las venas de cada hincha.
Este Nacional hidalgo en la derrota, buen perdedor, cuando le tocó mascar la bronca del querer y no poder.
Es mayo y es por definición el mes de Nacional, de su gente y de su historia.
El próximo sábado 6 de mayo se juega la primer parada del año por otro título frente a Defensor.
Y hay que ir al Franzini a ganar de entrada, arrasando al rival, demostrar porqué es el mejor , y dar vuelta olímpica en rodeo ajeno.
Integrar el mejor equipo que tenemos, pararlo en cancha como cuadro grande y jugar como cuadro grande, esa es , primero tarea del entrenador y segundo de los jugadores que están capacitados para ello. Mas allá de ganar muchos partidos sobre el final y jugando mal, llegó la hora del cambio radical de postura. Las condiciones están dadas y homenajear de la mejor manera al club, es una obligación. Que así sea.
Enrique Bello
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